jueves, 27 de julio de 2017

Ran.


En la mitología escandinava, Ran es una diosa marina que pesca a los ahogados con su red y entonces, habiendo enmarañado a los hombres en sus mallas y destruido sus barcos contra los cortados acantilados, los arrastraba tranquilamente hasta su sombrío reino.
Ran era considerada la diosa de la muerte para todos aquellos que perecían en el mar y los nórdicos pensaban que ella agasajaba a los ahogados en sus cuevas de coral, donde se extendían divanes para recibirles y donde el hidromiel corría libremente como en el Valhalla. Se pensó posteriormente que la diosa tenía una gran afición al oro, que se llamaba la "llama del mar" y se utilizaba para iluminar sus palacios. Esta creencia se originó con los marineros y nación del impresionante brillo fosforescente de las olas. Para ganarse las buenas bendiciones de Ran, los nórdicos se cuidaban de esconder un poco de oro cerca de ellos siempre que algún peligro en particular les amenazaba en el mar.

miércoles, 19 de julio de 2017

Cosacos zapórogos escribiendo una carta al Sultán.

 Iliá Repin, 1880-1891 - Reply of the Zaporozhian Cossacks.
Cosacos zapórogos... rememora un hecho legendario de la historia ucraniana, cuando en 1676 los cosacos ucranianos de Zaporozhia enviaron una carta al Sultán Mehmed IV del Imperio otomano, luego de derrotar al ejército imperial en batalla, y ante la insistencia del Sultán para que –a pesar de esta derrota– aceptaran su dominio. Los cosacos, liderados por Iván Sirkó, replicaron en forma poco común: escribieron una carta repleta de insultos y obscenidades.
El cuadro muestra la diversión de los cosacos al leer el ultimátum del Sultán, y escribir y leer la sarta de vulgaridades que constituyó la respuesta.
El ultimátum del Sultán:
Como Sultán, hijo de Mahoma; hermano del sol y de la luna; nieto y virrey de Dios, gobernante de los reinos de Macedonia, Babilonia, Jerusalén, Alto y Bajo Egipto, emperador de emperadores, soberano de soberanos, extraordinario caballero, nunca derrotado; firme guardián de la tumba de Jesucristo, delegado del poder divino, esperanza y confort de los musulmanes, cofundador y gran defensor de los cristianos,... Les ordeno, cosacos zapórogos, a someterse a mí voluntariamente sin resistencia alguna, y cesar de molestarme con vuestros ataques.
 
Sultán de Turquía Mehmed IV
La respuesta de los cosacos:
¡Cosacos zapórogos al sultán turco!
Oh sultán, demonio turco, hermano maldito del demonio, amigo y secretario del mismo Lucifer. ¿Qué clase de caballero del demonio eres que no puedes matar un erizo con tu culo desnudo?. El demonio caga, y tu ejército lo traga. Jamás podrás, hijo de perra, hacer súbditos a hijos de cristianos; no tememos a tu ejército, te combatiremos por tierra y por mar, púdrete.
¡Sollastre babilónico, loco macedónico, cantinero de Jerusalén, follador de cabras de Alejandría, porquero del alto y bajo Egipto, cerdo armenio, ladrón de Podolia, catamita tártaro, verdugo de Kamyanéts, tonto de todo el mundo y el inframundo, idiota ante nuestro Dios, nieto de la serpiente y calambre en nuestros penes. Morro de cerdo, culo de yegua, perro de matadero, rostro del anticristianismo, folla a tu propia madre!
¡Por esto los zapórogos declaran, basura de bajo fondo, que nunca podrás apacentar ni a los cerdos de cristianos. Concluimos, como no sabemos la fecha ni poseemos calendario; la luna está en el cielo, es el año del Señor, el mismo día es aquí que allá, así que bésanos el culo!
Koshovyi Otamán Iván Sirkó y todos los zapórogos.

domingo, 16 de julio de 2017

Fossegrim (Nacken)

Johan Egerkrans "Nakken"

En el folclore escandinavo, el Fossegrim, también conocido simplemente como Grim (noruego) o Strömkarlen (sueco), es un espíritu del agua o trol que toca el violín, especialmente el violín Hardanger, y puede ser persuadido para enseñar dicho talento.
El Fossegrim está relacionado con los neck o nixie, por lo que también es conocido en Suecia como Nacken, pero en lugar de estar relacionado con estanques y lagos se le asocia con ríos, con cascadas y con los molinos de agua.
El Fossegrim es considerado como un violinista de talento excepcional: los sonidos del bosque, del viento y del agua brotan de las cuerdas de su violín. Se dice que la balada del Strömkarlen sueco tiene once variaciones, y que la última se reservaba únicamente para los espíritus de la noche porque cuando la tocaba "las mesas y bancos, tazas y botes, barbagrises y abuelas, ciegos y cojos, incluso los bebés en la cuna"comenzaban a bailar.
Este espíritu estaría dispuesto a instruir a los humanos en sus habilidades a cambio de una ofrenda hecha en secreto un jueves por la noche: lanzar un macho cabrío blanco a una cascada que fluya hacia el norte con la cabeza mirando al lado contrario de la cascada o fenalår (cordero ahumado) robado del almacén del vecino cuatro jueves consecutivos. Si la ofrenda no tiene suficiente carne en los huesos, sólo instruirá al suplicante cómo afinar el violín. Si la ofrenda es satisfactoria, tomará la mano derecha de su pupilo y colocará sus dedos sobre las cuerdas del violín hasta que sangren, después de lo cual será capaz de tocar tan bien que "los árboles danzarían y los torrentes se detendrían en su caída".
El carácter amable ha ido cambiado en las leyendas hasta aparecer como un demonio vil y codicioso, que con su canto incita al suicidio de los que se aventuran en sus dominios.



domingo, 2 de julio de 2017

Las naves de Nydam.


Hacia el año 350, durante; la edad del hierro en el norte de Europa, una nave que trasportaba; unos cuarenta guerreros; arribó a una playa en la que hoy es el sur de Dinamarca.
Con su casco sin puente, las tablas; solapadas, los remos dispuestos en forma de espiga y la proa y la popa altas y simétricas, el barco tenía la configuración escandinava clásica. Los guerreros; empuñaban espadas de hierro y vestían ropa de lana. Un observador; actual habría deducido que eran vikingos, pero los desmanes de estos no empezarían hasta 450 años después. De hecho, aquellos hombres eran prototipos de los vikingos.

Cuando la quilla de su barco embarrancó en la arena, los guerreros arrastraron; hasta la playa su embarcación de cinco toneladas, a continuación se adentraron en el bosque y, poco después tropezaron con una aldea próxima al lago. Una decena de casas comunales con el techo de paja; alojaba a sus familias; con su ganado. Completaban el asentamiento los ahumaderos, la forja y otros edificios pequeños.
Cuando los guerreros atacaron, los jóvenes del poblado; salieron dispuestos a combatir. Los intrusos, inferiores en número, no tardaron en sucumbir a manos de los lugareños.
Los vencedores; encontraron la nave vacía. Al día siguiente la engancharon a unos caballos; y la remolcaron; hasta el lago. Una vez allí, empezaron a destrozar; las pertenencias de los guerreros muertos: espadas, lanzas, hachas, y efectos personales como; monedas, guardapelos, e incluso; tenacillas y limpiauñas. Los lugareños rompieron la madera de las lanzas y los mangos de las hachas, astillaron los astiles de las flechas; y doblaron sus puntas. El herrero se apropió de las espadas, las; retorció a martillazos y las; arrojó; al lago. Los lugareños; creían que con el sacrificio de todos; aquellos tesoros; expresaba su gratitud; por la victoria a los dioses que, según sus creencias habitaban en el lago.
Alguien abrió una brecha en el casco. Cuando empezó a entrar agua, los hombres empujaron el barco para que se alejara de la orilla y entonaros plegarias a los dioses de la tribu. Sacrificaron algunos caballos y los arrojaron al agua. Después contemplaron como la nave se escoraba y se hundía; bajo la superficie.

Las naves y las armas hundidas, en el pantano danés llamado Nydam Mose, no solo arrojan luz sobre los orígenes de las tradiciones vikingas, si no que ilumina también la oscura historia de la edad de hierro en el norte de Europa.